Casa cueva “el castillo” en Alcalá del Júcar, junto con la entrada al castillo le ofrecemos la oportunidad de visitar una casa cueva y poder ver como vivian antiguamente en estos tipos de construcciónes y como aprovechaban su espacio.
La casa-cueva es un edificio que puede ser adaptado a los deseos de cada usuario. La libertad de formas de esta técnica de construcción permite una planificación que requiere pensamiento espacial y un alto grado de creatividad.
Las casas-cueva se distinguen por su cercanía a la naturaleza y permiten una innovadora experiencia espacial más allá de las tradicionales cuatro paredes en ángulo recto.
En las casas-cueva, la tierra sirve como tejado aislante que protege de forma eficaz contra el frío, la lluvia y el viento. La tierra proporciona una protección natural contra los efectos negativos del entorno y las intromisiones no deseadas.
Las ventajas principales de las casas-cueva están, sobre todo, en sus aspectos ecológicos y de seguridad.
Una de las principales ventajas ecológicas de la casa-cueva está en su agradable temperatura interior. La construcción particular de las casas-cueva genera condiciones climáticas equilibradas: fresco en verano y protección contra el frío en invierno.
A causa de su tipo de construcción, las casas-cueva están protegidas contra las tormentas fuertes, puesto que no pueden ser arrastradas por el viento ni volcadas. Su estática y su falta de esquinas y de partes que sobresalgan (tejado) evitan además casi todos los puntos de ataque que podrían hacer que los efectos de la tormenta resultasen mayores.
Las casas-cueva se integran perfectamente en el paisaje. Sus tejados cubiertos por la tierra se acoplan de manera natural con el entorno y pueden integrarse en terreno montañoso y así adaptarse al paisaje natural.